Óptica Socialista
Opinión
Cuando analizamos las causas de la
merma de nuestra votación en las últimas elecciones, la cual se venía mostrando
y que se evidenció con contundencia el 6D. 2015. Notamos, que ésta paulatina
disminución del caudal de votos se inicia, desde la pérdida de la consulta para
reformar la Constitución Nacional, cuando la oposición logró ganarnos esa
elección, y, ellos –la oposición- aprovecharon esa experiencia para capitalizar
a su favor la motivación negativa, que provocó en el pueblo la escases inducida
exprofeso, de algunos productos como leche aceite, harina precocida, etc., que
en esa campaña usaron para desacreditar la revolución.
Aun cuando, ese triunfo de la
oposición fue por muy corto margen, es bien cierto, que en las siguientes elecciones,
ellos, aunque no triunfaron, fueron aumentando su votación. Todo ello lo
lograron explotando la ventaja que les dio el haber controlado durante mucho
tiempo la distribución de alimentos, y la libertad de acción que le permitimos
en un derroche de buenas intenciones, y una desconcertante impunidad a los delitos que perpetraron contra el pueblo, sin
ninguna justificación.
Quienes, de alguna manera escudriñamos estos eventos para despejar los por qué, notamos que la
causa principalísima ha sido la débil conciencia republicana socialista y
bolivariana, ello ha sido consecuencia
de la ineficiencia comunicacional e informativa para crear conocimiento, pero,
por si fuera poco, hemos fallado estrepitosamente en la aplicación y el
desarrollo del Poder Popular. En ello, según lo vemos, el ministerio de la
Comuna ha tenido una importante responsabilidad, porque no acompañó ni hizo
seguimiento a la constitución y desarrollo de los consejos comunales, las
comunas las eps., y otros entes relacionados, creados por la revolución bajo la
dirección del Presidente Chávez. Solo les impartió, las leyes, las cuales son
muy claras y expeditas, pero solo interpretaron de ellas el proceso de registro
y la posibilidad del acceso directo a algún financiamiento, pero que no les
enseño a ejercer el Poder Popular, hecho que significa la oportunidad de ser
dueños de su propio destino mediante el ejercicio de su soberanía.
Integrando estas dos fallas u omisiones o errores: La pobre comunicación
y el débil acompañamiento del Ministerio de las Comunas, en la coordinación de
las tareas básicas del Poder Popular. Nos
encontramos, con el desperdicio de la
oportunidad de transmitir conocimientos al pueblo, mediante la aplicación de
esa premisa de Don Simón Rodríguez, que nos dejó en sendas sentencias: "La América Española es Original, y
ORIGINALES han de ser sus Instituciones y su gobierno, y ORIGINALES sus
medios de fundar uno y otro. O Inventamos o Erramos". Arequipa 1828.
Y, “la mejor forma de aprender es hacer”.
Entonces, no hicimos Poder Popular, y por ello no aprendimos a empoderarnos; y a
ejercer a plenitud la potentia que nos
otorga la democracia bien entendida y aplicada, tampoco creamos
conciencia, acerca de la encomiable justicia social, beneficio que nos había sido
arrebatado por lo menos durante 520 años.
En consecuencia un amplio sector de la
población cayó en las garras de la campaña mediática, diseñada por la derecha
con el propósito de destruir la revolución bolivariana y socialista,
circunstancia que cambió sustancialmente el afecto del pueblo por su
revolución, hasta el extremo de asumir como favorable a sus intereses la oferta
de la oposición. Lo que hizo diana, como una explosión, en plena cara de la
revolución el 6D.
Asumiendo como acertado este
diagnóstico, tenemos que pasar a la solución de los problemas causados por la
oposición apátrida y desnaturalizada, el tiempo y los riesgos apremian y
acechan. Ello nos plantea y nos exige qué hacer y cómo hacer. Primero debemos
aplicar a fondo tareas planteadas en el Decreto de Emergencia, pero cada
actividad o acción debe ir acompañada con un exigente ejercicio pedagógico, que
incremente el aspecto cognitivo del pueblo, donde debe afincarse el esfuerzo
del trinomio (Pueblo-Gobierno-Partidos revolucionarios) que gobierna en
Venezuela, para contrarrestar y eliminar del consciente del ciudadano, la
nefasta enseñanza, que durante más de 500 años fue impartida al pueblo. De
manera tal, que al mismo tiempo, que va sembrando y produciendo la satisfacción
de sus necesidades básicas de vida, adquiera los rudimentos necesarios para
crearse la conciencia que le permita defenderse con éxito de la imposición y
dictadura de los hegemónicos, imperiales y acólitos, que secularmente nos han
designado para cumplir las nefastas tareas de ser: Mano de obra barata y
consumidor necesario, además de estar obligados a pagar el estacionamiento.
¡Independencia y patria socialista y
soberana!
¡Chávez vive!
¡La patria sigue!
¡Viviremos y venceremos!
William Castillo Pérez (el indio)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario