Óptica Socialista
Opinión
El imperio puede decir, que ya
salió de esa “piedra en el zapato”, que significó Hugo Chávez, en vida, lo que
ignora supinamente el imperio es que ahora, también, tendrá que salir del “piedrero
en el zapato” que significa todo un pueblo latinoamericano y mundial, quienes
ahora son millones de Chávez.
El comandante Hugo Chávez, nos
deja un legado de valores y conquistas inmenso, pero entre todos el más
importante es la Patria, y, sí asumimos La Patria como la describieron Alí
Primera y José Martí, la Patria conquistada y legada por Chávez a su pueblo, es
lo más sublime de la existencia terrenal: “La Patria es el hombre”, “La Patria
es Humanidad”.
Chávez es su pueblo hecho
millones, porque interpretó al pueblo, ello, lo convirtió en un líder
auténtico, porque es un líder para imbricarse con él, para involucrarse con él,
para integrarse con él. En suma Chávez y el pueblo son dos términos de una
ecuación amorosa leal y solidaria, cuyo resultado es un solo pueblo hecho
millones, presto y con armas en ristre, dispuesto a repeler con eficiencia y
éxito, cualquier intento de agresión contra
la patria por el imperio y acólitos.
Cuando los enemigos de la patria
grande que soñó Simón Bolívar, asesinaron al Padre Libertador, quedaron muchas
obras por concluir y otras ni siquiera se comenzaron a construir, tantos sueños
y buenos deseos frustrados. Pero 162 años después apareció el Centauro Chávez,
vino desde ese llano prodigioso en guerreros, diestros y hábiles en la táctica
y la estrategia militar. Pero, este centauro moderno además adornaba su
existencia con un excelso humanismo, con una solidaridad inmensa, con amor para
su pueblo tan sublime y tan leal, que lo obligó a formarse como el más
formidable estadista mundial. El centauro Chávez completó muchas obras para el
pueblo, que habían quedado inconclusas, pero fue más allá, se convirtió en el
libertador de conciencias, elevó el conocimiento del pueblo a niveles tan altos,
que todos y cada uno de los ciudadanos, quienes se asumen chavistas, tiene la conciencia
y la mente blindada, contra las influencias de las campañas alienantes que el
imperio imparte mediante la caja idiota –la TV- entre otros medios.
Cuando Túpac Catari, fue
descuartizado atado a cuatro caballos, por el imperio español, delante de una
multitud de abyayalos originarios para escarmentar a los rebeldes, este
guerrero libertario digno exponente de la grandeza de nuestro pueblo abuelo,
exclamó, mientras lo martirizaban: “Mátenme, volveré hecho millones”. Este
hecho histórico ocultado y silenciado por los secuestradores de la verdad, fue
como una orden, para mantener todos los pueblos del Abya Yala, en pie de lucha.
400 años después Hugo Chávez toma ese mandato, y rescata y reivindica nuestra cosmovisión
y nuestra cosmogonía originaria, para que, imbuidos de nuestra identidad étnica, hoy gracias a su
formidable obra libertaria, seamos millones de Hugo Chávez, quienes haremos
palabra cierta y viva la profecía Aymara.
Gracias comandante, por esa vida
tuya, que fuiste capaz de darnos, no nos mentías, cuando decías, que te
consumirías por nosotros -tu pueblo-. Te
confieso que tu muerte me duele, porque considero que no te has ido por
designio divino, sé que te has ido por maldad humana de los contrarrevolucionarios,
me duele de solo pensar cómo tu indomable voluntad de darnos la mayor suma de
felicidad, languidecía ante los embates de la maligna agresión de la
enfermedad. No puedo ser deshonesto conmigo, no soy diplomático ni religioso,
estoy adolorido y molesto porque me mataron al mejor amigo que he tenido, ese
que nos dio 14 años de felicidad, la felicidad de ser, un humano digno, porque
le hicieron daño y se afincaron más en su saña, porque él era estoico y firme
en su propósito de luchar por siempre por su pueblo, porque abusaron de su
humanidad y su familia y su pueblo.
Lucharemos, hasta el fin de
nuestras vidas, para merecer todo lo que nos has dado y seguirás dando con tu
ejemplo, y, el mandato que nos dejas de defender tu revolución bolivariana, voy
a parafrasear al Apóstol José Martí
“Deme la patria que me diste,
algo que hacer por ella y tendrá en mí el más agradecido servidor”
¡INDEPENDENCIA Y PATRIA SOBERANA
Y SOCIALISTA!
¡VIVIREMOS Y VENCEREMOS!
¡GRACIAS MI COMANDANTE, POR TU
VIDA!
William Castillo Pérez (elindio)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario