Por william Castillo Pérez
Confieso que no he
participado en ningún evento histórico de los ya conocidos, que han cambiado el
destino de la Patria y, que han contribuido a proveer a la patria venezolana de buen viento de cola para retomar
la Historia libertaria e independentista
destruida el ano 1830. Tampoco he sido herido en combate militar o, en
acción civil clandestina accionando contra los regímenes asesinos de la cuarta
república, no he estado preso por
político no he sido torturado pero siempre
me ha molestado y me molesta la injusticia
a la cual hemos estado sometidos, por obra y gracia del depredador
imperio y sus vasallos criollos, que le han servido de cancerberos, para
expoliarnos nuestros haberes, y nuestra fuerza de trabajo la han puesto al
servicio del incremento de sus intereses producto de la expoliación de nuestro
pueblo..
Es por ello, que confieso que me llena de mucha, ira ver
tantos traidores y aprovechadores de oficio que siempre han estado como
mercenarios, cobrando con creces, cualquier participación en los últimos
acontecimientos heroicos que nos han llevado al sitial político social que
ahora es nuestra forma de vida (la revolución bolivariana) que la fortuna y la
oportunidad o ubicuidad les ha brindado, para disfrutar de las mieles del
poder, y que, cuando su apetito ha estado amenazado, han saltado la talanquera
y salen despavoridos a meterse bajo las faldas de Globovisión. Esta especie de
infección que ha tenido que soportar la revolución en este tiempos, nos ha
hecho visibles a algunos personajillos
como el saltador Gobernador de Lara Henry Falcón, El
Gobernador Gato Briseño, el diputado Gateare,
el diputado Ismael García, el diputado Uzcategui, el Gobernador Liborio
Guarulla y muchos que han traicionado todo para irse tras la nada, – la MUD y
el majunche- irse tras unas cuantas
monedas que al final les obligarán como a Judas a terminar con la soga del
desprecio apretándole el cuello.
Es en esa circunstancia, cuando uno piensa, en todos aquellos
luchadores, quienes perdieron la vida; en el combate, en las cárceles, en la
tortura, quienes fueron heridos, quienes
están lesionados, quienes han estado en
el exilio alejados de su familia y hasta
quienes han sobrevivido y, están
llevando una vida normal, sin recibir
prebendas especiales, después de haber participado en los hechos que parieron
la revolución bolivariana y la quinta república.
Toda esta reflexión, nos sirve para proponer al Psuv, insistir con más fuerza en dos aspectos muy
importantes, relacionados con el devenir político del pueblo, si bien es
cierto, que en el conjunto del país se puede observar un claro progreso en la
vida política del venezolano común, pero falta mucho, y a veces nos parece que
es muy lento o pequeño el progreso en ese sentido. Un primer aspecto en el cual debe afincarse la revolución es la ideologización
del venezolano, de manera tal que la
gran mayoría del pueblo sepa exactamente cual es el objetivo de nuestra
revolución. Otro aspecto en el cual la revolución debe esforzarse, es que la
acción de gobierno que beneficia y mejora al pueblo, llegue eficientemente al
pueblo otrora excluido, les alcance a todos, y también le permita mostrar –al pueblo- los signos exógenos del
progreso, hemos hecho un gran esfuerzo para dotar a una parte de la población, de enseres,
artefactos y otros elementos que coadyuvan
en la comodidad del pueblo, pero no hemos desmontado las trabas y trampas del
comercio capitalista que destroza el poder adquisitivo de la gente, de manera
tal que seguimos viendo hermanos, quienes arrastran miserias por los caminos de
la patria.
Aun cuando debemos decir, que desde finales del 2011 se crearon varias grandes
misiones que hoy están mostrando,
venezolanos favorecidos por esas misiones, también debemos agregar,
que esta muestra de progreso debe ser contundente. Porque, motivado a que,
nuestra revolución es pacifica, la oposición tiene mucha capacidad de maniobra
para producir falacias, que desgraciadamente tiene asidero en la mente de muchos
venezolanos, quienes son confundidos, y en consecuencia pierden su capacidad de discernimiento porque
tienen una débil conciencia revolucionaria,
por falta de ideología. La revolución entonces,
debe existir para que haya buen vivir y la revolución y el pueblo deben mostrar
orgullosamente y arrogantemente su progreso ante los ojos de los opositores y
sus acólitos confundidos.
Por ello, nosotros
pensamos, que la acción efectiva del gobierno revolucionario, alcanzando a los
humildes y colocándolos en posición visiblemente mejorada es el mejor disuasivo,
contra las apetencias de la oposición.
Es de hacer notar, que la oposición en un alarde de estupidez, se atreve a
mostrar sus nefastos intereses contra la
felicidad del pueblo para conquistar el apoyo de ese mismo pueblo en las próximas
elecciones, ¿Será que ellos, si se han dado cuenta que hemos fallado en ideologización
y comunicación del pueblo venezolano?
Recordemos que una muestra de falta de ideología, de
información, y distribución de beneficios, es, que según las encuestas, en una
población, de 30 millones da habitantes,
más del 30% no haya internalizado las mejoras comprobadas que la revolución, ha
producido en todos los aspectos de la
patria, como nunca ha acontecido en
Venezuela, todo ello en un corto período de 13 años.
Evidencia importante, es el estrato social de la clase media, el cual,
es el sector que ha recibido un importante beneficio por la revolución. Bien,
hasta hoy, esa clase no ha dado apoyo contundente al presidente Chávez y la
revolución. Si tomamos en cuenta que ellos – la clase media- http://www.aporrea.org/actualidad/a111621.html valoran mucho la tranquilidad y la
facilidad de ingresos para su tradicional
y fiera competencia con sus congéneres, en la batalla del consumo
suntuoso –efecto natural de la falta de ideología- http://www.aporrea.org/actualidad/a108700.html
deberían ser los primeros
en apoyar la candidatura del comandante
Hugo Chávez.
¡INDEPENDENCIA Y PATRIA SOBERANA Y SOCIALISTA!
¡VIVIREMOS Y VENCEREMOS!
William Castillo Pérez
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