A los camaradas revolucionarios que suelen olvidar fácilmente, la característica principal de nuestro principal rival, que es el imperio capitalista, estamos enviando este recordatorio de acontecimientos, que en la oportunidad cuando se sucedieron significaron una evidente confrontación en contra de nuestro derechos humanos y nuestra seguridad personal, en la permanencia del estatus político que nos habíamos dado en comicios electorales, en los cuales impusimos nuestro deseos para con nuestra patria y nuestros familiares.
La referencia histórica es un hecho, que debe estar presente en todos nuestro análisis, de las situaciones que vivimos a cada día de nuestra vida republicana, y debe ser un faro que guié nuestras acciones y sea faro que nos informe con claridad diáfana, el sendero que debemos andar diariamente hacia el logro de nuestra máxima felicidad y seguridad.
Por ello vale la pena recordar que el 9 de enero del año 2003 cuando moría por habérsele "escapado de las manos" (según Carlos Ortega) a la coordinadora democrática, el nefasto y criminal paro, que decidieron aplicar a Venezuela y a los venezolanos, los criminales opositores al gobierno legitimo del presidente Chávez. El ministerio de Relaciones Exteriores de la República de Cuba, emitía la siguiente declaración oficial, donde daba cuenta del ataque, que pretendía la coordinadora fascista de lo partidos de oposición venezolana.
Según esta declaración el ministerio de Rel. Exteriores de Cuba decía, lo siguiente:
“El canal de televisión golpista y fascista Globovision y otros canales privados venezolanos, durante el día y la noche de ayer han estado repitiendo cada 30 minutos, como promedio, consignas groseramente provocadoras y mentirosas contra cuba, suscritas por la llamada coordinadora democrática. Entre los tres objetivos, con los cuales esta ha estado convocando a realizar una manifestación hoy en Caracas, se afirma cínicamente que uno de ellos es “impedir el regalo de nuestro patrimonio mas importante a Cuba”. De esa forma burda se implica a nuestro país en los asuntos internos de Venezuela”.
Con esta falacia, se pretendió confundir a la opinión pública venezolana e internacional, como ha sido la constante acción de la canalla imperial y sus lacayos nacionales quienes son las que mandan y gobiernan a esta estúpida oposición. Que siempre es diligente en entregarnos motivos y razones más que suficientes para no cederle ni un milímetro de terreno, en la confrontación que nos ofrecen.
Toda esa mentira que han estado propalando contra el esfuerzo que realiza el gobierno revolucionario del presidente Chávez, no debe ser olvidado de ahí este recordatorio que siempre estamos haciendo, ya que no podemos descuidarnos ni un momento, ese cuento de que Cuba no pagaba el petróleo que se le vendía y se le vende, es un argumento lleno de toda invalidez. A continuación mostramos la versión directa de la declaración del gobierno cubano al respecto.
La verdadera historia, declaración del min. De Relaciones Exteriores de Cuba:
“El 30 de octubre del 2000 los presidentes de Cuba y Venezuela suscribieron el convenio de cooperación entre nuestra naciones, como parte del cual se firmó el 22 de noviembre de ese propio año el contrato de compra venta de petróleo crudo y sus derivados, en el cual se establecieron los términos y condiciones del suministro de hasta un total 53.000 barriles diarios por un plazo de 5 años. Tales términos y condiciones fijados a Cuba son iguales o menos ventajosos, que los pactados para el resto de los países de América Central y El Caribe, también beneficiarios del convenio de Caracas.
Los embarques comenzaron en diciembre del 2000 y se ejecutaron sin interrupción hasta el 11 d abril del 2002, fecha del frustrado golpe fascista. En ese periodo se habían recibido 25,589.000 barriles.
Hasta igual fecha, de acuerdo con lo convenido, se pagaron en efectivo y a precios del mercado mundial, 439,7 millones de dólares. Los pagos aplazados, según la forma pactada, comenzarían a honrarse a finales del presente año 2003.
La suspensión de los suministros en abril fue exclusivamente una responsabilidad de los sectores golpistas, de los que formó parte un grupo de la gerencia de PDVSA. El 5 de Abril del 2002 había 4 barcos esperando cargar combustible con destino a Cuba. Tres de ellos estuvieron listos el día 9, pero solo uno de ellos pudo salir en la mañana del 11 de Abril. Dos buques cargados, ya propiedad de nuestra empresa Cuba-Petróleo (CUPERT) según el contrato, fueron vendidos a terceros por decisión unilateral de las autoridades que operaban PDVSA; el cuarto nunca fue cargado. Estos hechos dos días antes del golpe de estado fascista de abril.
Como consecuencia de esta situación, no quedó otra alternativa para Cuba que salir de inmediato a comprar el petróleo y los derivados que el país requería, a través de intermediarios y a precios muy superiores agravados por la urgencia y los altos costos de los fletes impuestos por la distancia, ya que algunos cargamentos solo pudieron ser contratados en Europa y África. Hubo embarques incluso, que no se pudieron traer por falta de Barcos debido a las conocidas limitaciones que impone el bloqueo de los estados Unidos a la s embarcaciones que tocan puertos cubanos.
Para que se tenga una idea, como consecuencia de esta interrupción en el abastecimiento d crudo venezolano. Fue necesario paralizar la refinería de Santiago de Cuba, la segunda en importancia del país, desde abril hasta septiembre, lo que provocó la importación adicional de derivados con gastos superiores, y recurrir alas reservas de la nación previstas para situaciones excepcionales. La erogación extra en divisas convertibles por este solo concepto fue del orden de los 85 millones de dólares, sin contar las afectaciones que ello represento a la economía y la población.
En julio del pasado año se llegó a un acuerdo de renegociación con PDVSA encaminado a reanudar os embarques en agosto, lo que solo se hizo realidad en septiembre, el cual incluyo el pago injusto que esa empresa impuso a Cuba de 13 millones de dólares por concepto de mora, que fue aceptado por nuestro país, adoptando una posición de máxima comprensuio0n a las dificultades del gobierno bolivariano de Venezuela, a pesar de que la responsabilidad de la demora en los pagos no correspondió en lo absoluto a la parte cubana.
De septiembre a noviembre de 2002 Cuba recibió 4.444.000 barriles, y pago 96,4 millones de dólares, justo y exacto, sin atraso.
El 2 de diciembre, consecuencia del paro convocado por la oposición, se interrumpieron las entregas de crudo, acordadas en el acuerdo de Caracas, ocurriendo las mismas consecuencias del periodo abril y agosto pasado.
Por la reducción de la producción petrolera en PDVSA, ocasionó un aumento en los precios del petróleo en el mercado mundial, y a la vez escases del mismo. Estos incumplimientos de PDVSA ocasionaron a Cuba daños superiores a los 200milones de dólares. Sí sumamos a esto las circunstancias adversas de la crisis económica mundial y las afectaciones de tres huracanes, llegamos a tener perdidas superiores a los 2.500 millones de dólares.
Después de la paralización de la industria petrolera venezolana, del 2 de diciembre del 2002, en los primeros diez días de enero 2003, se embarcaron a Cuba dos cargamentos de petróleo, que equivales a menos del 5% de lo exportado a Cuba por Venezuela después del sabotaje. Durante más de un mes no llego a cuba un solo barril de petróleo venezolano del millón y medio de barriles que debíamos recibir según el convenio.
Sin embargo, los mal intencionados que propalan la falacia que “Chávez le regala petróleo a Cuba”, no solo olvidan los cientos de millones de dólares pagados por Cuba a PDVSA, cumpliendo cabalmente sus compromisos mes por mes, centavo a centavo, con no pocos esfuerzos y sacrificios, y las afecciones causadas a nuestra economía al desconocer la clausula que obliga a cualquiera de las partes a notificar por escrito el interés de terminarlo, con no menos de treinta días de antelación al vencimiento del contrato, sino que ignoran olímpicamente, que no existe “regalo” alguno y que el Convenio de Cooperación suscrito no transita en una sola dirección y que su materialización beneficia a ambas naciones.
En cambio, ¿cuál ha sido la actitud de Cuba? ¿Ha causado acaso algún daño a Venezuela? Basten solo cuatro ejemplos, entre otros que pudieran exponerse, de la cooperación cubana con ese hermano pueblo venezolano. Un total de 748 médicos, enfermeros y técnicos de la salud cubanos ha prestado servicios gratuitamente en lugares peligrosos y en las mas intrincadas regiones del territorio venezolano donde existían dichos servicios, los cuales han salvado numerosas vidas y establecido la salud a decenas de miles de venezolanos. Gracias al abnegado esfuerzo de esos médicos, la mortalidad infantil en los lugares donde ellos trabajan se ha reducido de 19,5 a 3,9 por 1000 nacidos vivos, índice mejor incluso que el de cualquier país desarrollado del mundo”.
Hasta aquí la referencia al informe del ministerio de Rel. Exteriores de Cuba con respecto al pacto de Caracas, es de hacer notar que este informe tiene más datos esclarecedores.
En este extracto del informe del ministerio de Relaciones exteriores, se nota claramente la diferencia sustancial que existe entre los países que practican el socialismo y los que perpetran el Capitalismo: La solidaridad en el capitalismo es un cadáver de las interrelaciones humanas, y en el socialismo es, un halito de vida sin el cual la raza humana indefectiblemente encontrará la muerte. Por ello es que decimos:
¡PATRIA SOCIALISMO O MUERTE! ¡NECESARIO ES VENCER!
William Castillo Pérez
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